"Cuenta la leyenda que un ángel bajó del cielo hace un poco más de medio siglo. Tenía la misión de entregar a un recién nacido el don más grande que se entregaría en siglos, el de la habilidad extraordinaria.
Los que más saben del tema, cuentan que los ángeles entregan los dones en el momento del nacimiento acariciando al niño mientras duerme su primera noche.
Este ángel tramaba no entregar todo lo que traía de una sola vez, y así fue. El 27 de Octubre del 60, en un hospital de Chacabuco, se presentó en la noche y acarició a un recién nacido.
El ángel se transformó en fugitivo con el resto de lo que debía entregar. La guardia celestial por completa salió en su búsqueda pero el ángel los eludía con gran facilidad. Había en él, además de la habilidad, marcados rasgos de rebeldía como también, ciertos vicios difíciles de curar.
Al saber que ni mil guardias celestiales eran capaces de detenerlo, el mismo jefe tuvo que bajar para lograr capturarlo. La búsqueda se hacía muy difícil porque los ángeles comunes lo cubrían, es que él tenía un carisma especial y los demás lo adoraban. El ángel fue tentado de mil maneras y finalmente capturado en un descuido.
A los tres días de aquella primer entrega, en villa Fiorito, el angel entregó el resto tocando a un niño en su primer noche de vida.
Tanto del recién nacido en Chacabuco como el de Villa Fiorito, se sabe, fueron geniales en su explendor, hábiles como nadie, talentosos inigualables, ganadores en los mejores escenarios y en los más humildes, ídolos de multitudes. Inlcuso hoy siguen vigentes destellos de esa extrema habilidad.
De aquel ángel no se supo más nada, todavía nadie ha sido bendecido, con un don semejante como el de aquellos dos niños. nacidos en los últimos días, de Octubre del 60.”
Los que hacemos dosparedes.
