La primera categoría paga la entrada. Año a año hablamos de lo que crece el nivel en la provincia, antes de la fecha de Hípico marcábamos algunos puntos que había que tener en cuenta en este año y en esta primera fecha en particular, y para comenzar, el espectáculo no defraudó, la primera categoría “cumple” en cada uno de sus partidos.
Hablamos de Hípico, club con 150 años de Historia, con su mística y su trinquete chiquito y rápido como ninguno. Fue un tiroteo constante, hace algunos años el público se quejaba de que en la paleta moderna no se tiraba y que los partidos se hacían muy largos, bueno ahora en esta primer fecha había quienes pensaban que se tiraba demasiado. Es que la cancha es muy chica, y el juego se hace muy agresivo, el que tiene la oportunidad ataca y toma la iniciativa, es difícil defender y mucho más contraatacar, por eso el que busca generalmente encuentra. Los zagueros atacan y los delanteros defienden, es el mundo del revés, entretenido como nunca, intenso y espectacular. Se tiró de todo y de todos lados. Dos paredes de todos los colores, cascadas, bajadas por zurda, San Sebastián, troncos, cortadas y el nuevo golpe de tambor alto, pique y afuera, que ya varios tiran con consistencia y efectividad. Algunos delanteros con experiencia comentaban “otra más para defender?” hasta incluso piden que se prohíba, ya defender todo lo que tiran es muy difícil y si además se suman nuevos golpes está complicado.
Hablamos en la previa de paridad y no le erramos. La mayoría de los partidos se definieron en tres sets y muchos de ellos por uno o dos puntos de diferencia. Este año cinco o seis parejas tienen chances reales de ganar cada fecha. El nivel, la cancha, la suerte, quien este más justo en los puntos importantes será quien se quede con los 10 puntos para la tabla general.
El viernes va a ser durísimo para cualquiera, nadie quiere caer por que será difícil de pasar, en este caso pasaron Hipico y Ferro los dos locales pero dando el máximo esfuerzo dejando afuera del sábado a jugadores de la talla de Gabriel Villegas, Sebastián Andreasen y Guillermo Osorio. El Viernes es un torneo en sí mismo, pasar es como un título y los que quedan para la próxima saben será igual o más difícil.
De los del Sábado, Facundo Andreasen y Bilbao siguen siendo los candidatos, son los últimos campeones y están para más. Gastón Inchausti y Narbaits pasaron desde el viernes y perdieron por un punto en cuartos, ya fueron campeones y se sabe lo que rinden. Jorge Villegas volvió al provincial en gran nivel, tirando los efectos como se sabe que nadie tira y junto a un Mosca Torres prendido son un parejón. Pecker y Nicosia hicieron una muy buena fecha llegando a la final comenzando con el pie derecho en un torneo que quieren pelear arriba. Alfredo Villegas esta intratable, la cantidad de dos paredes que tiró en todo el fin de semana son incontables, la intensidad con la que juega es inigualable, bien acompañado por el local Camilo Ibarra pasó del viernes y dio pelea el Sábado y ahora nadie quiere enfrentarlos. Todos dieron un espectáculo pocas veces visto en un trinquete particular, todos tienen aspiraciones serias a ganar partidos en la segunda fecha.
De la Vega y Santiago Andreasen se quedaron con la fecha, Rodrigo en gran nivel, inteligente, astuto, certero para definir y defendió todo lo defendible. Santiago la está quemando real, en una cancha chiquita pudo dominar con su potencia, atacar de todos lados y llevar los partidos a su ritmo, desplegó todo su arsenal de golpes a una velocidad imposible y fue elegido el jugador de la fecha. Lezama quedó puntero y ahora los espera desde arriba.
Tal vez para reflexionar un poco por todos (jugadores, árbitros, allegados y publico) es el tema de bajar un poco los decibeles. Se juegan cosas importantes en cada punto? Si. Hay intensidad en cada pelota? Si. A la gente le gusta que todos dejen todo y nadie regale nada? Si. Todo es parte del espectáculo? También. Pero en ocasiones nos estamos yendo de mambo y por momentos se juega más a los gritos que a la paleta. Los árbitros se pueden equivocar, la cancha era difícil por lo rápida por la cantidad de pelotas que salen raras, había poco espacio y se dieron muchas “vueltas”, todos tienen que colaborar. El público de afuera está bien que participe y aliente pero siempre dentro del respeto por el rival, lo jugadores reclamando pero siempre dentro del respeto por el contrario, por el árbitro y las autoridades, si no la cosa se pone pesada. En el ambiente nos conocemos todos, pero piensen en alguien que va a ver paleta por primera vez, o si como todos soñamos, los partidos fuesen por TV, que tipo de espectáculo queremos que se vea? Todos pueden poner buena voluntad para que los límites sean mejores. Lezama gano la primer batalla, deportiva, dentro de la cancha y con juego.
La próxima en De la Garma no se la pierde nadie.
Felicitaciones al Club Hipico por los 150 años y por la organización de la fecha.
Felicitaciones a Lezama, De la Vega y Santiago Andreasen campeones!
Los que hacemos dosparedes.
